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Nuria Cuoto (18) y Natalia Grebenshikova (15) murieron luego de semanas de agonía

28.12.2016

Rechazan que el asesino sea inimputable. Para la mamá de una de las chicas acuchilladas en La Boca, el asesino estaba consciente y había planificado el ataque. Las familias de las víctimas acusan a la jueza de fallar en tiempo récord y de no investigar.

Luego de que la Justicia sobreseyera y declarara inimputable al veterinario que mató a cuchillazos a dos adolescentes de 15 y 18 años en Plaza Irala, en La Boca, la madre de una de las víctimas acusó a la jueza a cargo de la causa de fallar en tiempo record. “Durante 44 días estuve en el hospital acompañando a mi hija en su agonía y en veinte días la jueza ya resolvió la causa. Ni un accidente de tránsito se resuelve tan rápido”, se quejó entre el dolor y la angustia Anna Rodionova, madre de Natalia Grebenshikova, la más joven de las chicas que recibió cuatro puñaladas.

El trágico episodio ocurrió el 11 de octubre en el parque sobre Almirante Brown al 300, en La Boca. Nuria Cuoto (18) y Natalia Grebenshikova (15) estaban junto a un grupo de amigos festejando un cumpleaños cuando se les acercó un joven que comenzó a agredirlas con un cuchillo. La mayor de las chicas recibió 17 puñaladas y la menor, otras cuatro. Ambas fueron trasladadas al Hospital Argerich, donde murieron tras semanas de agonía.

Luego se supo la identidad del agresor: Mariano Alejandro Bonetto, un veterinario de 27 años, con tenía problemas psiquiátricos. El 14 de diciembre pasado la jueza de instrucción del caso, Wilma López, lo declaró sobreseído por inimputable.

“Me siento completamente destruida, insultada, aplastada por esta decisión. Desde el  11 de octubre yo no vivo, sigo existiendo con un nudo de dolor en la garganta. Y en este caso hay dos jóvenes mujeres asesinadas salvajemente y según el fallo resulta que no hay responsables de estas muertes”, expresó Rodionova, entre dolor y angustia, en una extensa carta que envió a los medios.

Para Rodionova, la fiscal a cargo de la causa, Susana Calleja, “no investigó nada”. “La jueza hizo su declaración sólo a base de las pericias psiquiátricas y psicológicas, o sea a base de las palabras del mismo asesino. Nuestra parte, la querella, presentamos mas testigos y la jueza no los llamó a declarar. Pedimos la ampliación de las pericias y no hubo respuesta. Para nosotros las pruebas de que Bonetto es inimputable son absolutamente insuficientes, con esta idea presentamos nuestra apelación”, respondió la madre al fallo que declara el sobreseimiento del asesino.

La jueza determinó, como medida de seguridad, la internación de Bonetto durante 25 años en el pabellón psiquiátrico del penal de Ezeiza. Sin embargo, para la madre significa una puerta de salida ya que la familia del veterinario puede solicitar el traslado a una clínica privada.

La familia de las víctimas sostiene que Bonetto “se daba cuenta de lo que hacía” y que había planeado el asesinato con tiempo. “Compró el cuchillo con anticipación, y no un cuchillo cualquiera, sino uno de combate. Unos días antes la gente lo escuchó decir que odiaba las mujeres y que habría que matarlas a todas. Tenía la consciencia total de lo que estaba haciendo. Y aun si era un loco, era un loco consciente. La enfermedad mental no debe implicar la inimputabilidad en el caso de cometerse un delito tan grave como un doble femicidio. Pero el caso ni siquiera se investigó”, finalizó la madre.

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