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En la Ciudad de Buenos Aires, se destina la mitad de los ingresos al pago del alquiler

4.12.2018

La Dirección de Estadísticas y Censos porteña publicó los datos del tercer trimestre del 2018 en el que se da cuenta de un aumento interanual de 35,8% para departamentos de un ambiente, 31,8% para los de dos, y 25,8% para los de tres ambientes.

El informe asegura que un departamento de un ambiente se alquila, en promedio, a 9.318 pesos; uno de dos ambientes a 12.346, y uno de tres ambientes a 18.229.

Para un habitante con ingreso promedio, alquilar un monoambiente representa el 39% de su ingreso, un dos ambientes representa el 52% y un tres ambientes el 77%.
Los datos para asalariados son similares: 40% para monoambiente, 53% para dos ambientes y 78% para tres ambientes. Estas cifras no incluye el resto de los gastos mensuales (expensas, ABL e impuesto inmobiliario y tarifas de servicios públicos).
Si se comparan los precios del alquiler con los ingresos de trabajadores por cuenta propia y jubilados, los datos son aún más escandalosos. Un trabajador por cuenta propia tiene un ingreso promedio de 17.601 pesos, por lo tanto, debería destinar el 52% de sus ingresos para alquilar un monoambiente, el 70% para un dos ambientes y el 103% para un tres ambientes. En tanto, los jubilados tienen un ingreso promedio de 14.207 pesos, por lo que deberían destinar el 65% de sus ingresos para un monoambiente, el 86% para un dos ambientes y el 128% para un tres ambientes.
Para Inquilinos Agrupados, en una ciudad donde el 40% de sus residentes alquila, se está profundizando un fenómeno de “pobreza invisible”: “Inquilinos que viven en barrios de sectores medios, en edificios que aparentemente se encuentran en buenas condiciones, pero que dentro de esos pocos metros cuadrados viven una situación de pobreza. Son inquilinos que destinan la mitad de sus ingresos en el pago del alquiler, que destinan otro porcentaje importante para afrontar expensas, impuestos y tarifas de servicios públicos, que cada dos años tienen que tener ahorros suficientes para renovar el contrato y, por lo tanto, se les hace imposible hacer frente a otros gastos elementales de la vida cotidiana”.
Todo esto va de la mano de otras situaciones como la rescisión anticipada de contratos por imposibilidad de pago, jóvenes que vuelven a casa de sus padres, jubilados que se mudan a casa de sus hijos, subalquiler de habitaciones a desconocidos, entre otras.
Al respecto, Gervasio Muñoz, presidente de Inquilinos Agrupados, afirmó: “Esta situación se viene construyendo desde hace años, parte del problema es la desregulación absoluta del mercado de alquileres y las políticas que tienden a aumentar el valor del suelo urbano. Revertir el problema también llevará años, pero implementando políticas en la dirección inversa”.

Para montar su “Parque Navideño”, el GCBA borra mural en homenaje a las Madres de Plaza de Mayo

4.12.2018

 

El Gobierno porteño se prepara para la sexta edición del Parque Navideño, que invita a sacarse fotos con Papá Noel, en Parque Chacabuco. El evento comenzará el próximo 8 de diciembre, pero toda la zona está vallada desde que empezaron los preparativos, el 25 de noviembre. Al atravesar esas vallas, una vecina detectó que en el marco de la obra se está tapando un mural realizado por los vecinos en homenaje a las Madres de Plaza de Mayo.

La imagen, ya borroneada, conformaba una ronda de pañuelos blancos, con la leyenda “Con los sueños de ayer construimos la lucha de hoy”. Fue pintada por los vecinos el año pasado, en el marco de los pañuelazos simultáneos realizados en distintos puntos de la Ciudad de cara al 24 de marzo.

“Está medio Parque Chacabuco vallado por esta obra, que ya de por sí es una molestia. Pero yo pasé igual, y menos mal, porque así vi que están tapando el mural. Había un empleado rasqueteando los pañuelos. Le pregunté si lo estaba sacando y me dijo que sí, pero no por iniciativa propia. Que lo tiene que sacar”, contó Lucía Herrera, vecina de la Comuna 7, en diálogo con Nueva Ciudad. La mujer tomó fotos y las envió a la fiscalía contravencional porteña, para denunciar el caso. En la Línea 147, en cambio, no le quisieron tomar la denuncia.

“Más allá de que los pañuelos son íconos reconocidos internacionalmente, me afecta particularmente en lo personal, porque tiene que ver con mi historia y la desaparición de mi papá”, remarcó la mujer, hija del militante político Mario Waldino Herrera, secuestrado y asesinado durante la última dictadura cívico-militar.

“Es una falta de respeto”, cuestionó Herrera, y anticipó: “Los volveremos a pintar las veces que sea necesario”.

Presupuesto 2019 de la Caba

29.11.2018

“Un dibujo para pagar deuda con ajuste e impuestazos”

El legislador del Frente de Izquierda Gabriel Solano (PO) rechazó el Proyecto de presupuesto elaborado con por el ejecutivo porteño para 2019. Solano afirmó que “sería una irresponsabilidad de nuestra parte votar este presupuesto que es un dibujo. Está armado sobre un dólar a 40 pesos y una inflación del 23%, otro exceso de optimismo incompatible con la realidad. Se trata de ocultar la enorme crisis que se desarrolla en el país y en la Ciudad, que se pretende descargar sobre la población. La parálisis económica pactada con el FMI afectará los ingresos fiscales, el propio presupuesto admite una caída del 0,5 del producto bruto. Pero también cae el patentamiento de autos y el mercado inmobiliario, sobre los cuales la Ciudad cobra sus impuestos. Esta caída pretende ser reemplazada por una política de tarifazos permanentes en el ABL, las multas, los peajes, el remate de las tierras de la Ciudad y la rebaja salarial de docentes, enfermeras y municipales”.

“El ajuste en salud y educación está profundizando la crisis en las vacantes, que alcanza a 15 mil chicos que no pueden acceder a la escuela pública, y la decadencia edilicia de las escuelas. En salud se desarrolla un achique hospitalario con la compactación  de 5 hospitales  en el Complejo Hospitalario Sur que ya se encuentra en este presupuesto. En materia de vivienda, el desarrollo de la especulación inmobiliaria y la devaluación está imposibilitando el acceso a la vivienda y ni siquiera se cumple con la urbanización de las villas” continuó Solano.

“Este presupuesto es el botín de los Benito Roggio y los Caputo y toda la patria contratista que llenan las hojas de los cuadernos de la corrupción a través de la tercerización creciente de las obras y servicios que  tiene que realizar el Estado, como en las escuelas y hospitales. El escandaloso contrato de la basura fue denunciado por contener sobreprecios del 200% y formar parte de un sistema de financiamiento de las campañas electorales del macrismo”.

“Este ajuste que a nivel nacional fue pactado entre Macri, el FMI y la oposición pejotista está llevando al país a un callejón sin salida y provocará nuevas crisis y choques en los cuales el Frente de Izquierda estará siempre del lado de los trabajadores. La salida a la crisis demanda una enorme intervención de la clase obrera y una Asamblea Constituyente para proceder a una reorganización social y económica sobre bases socialistas” finalizó.

Aumento del 38 por ciento para el ABL. Más impuestos, más deuda, menos obras

29.11.2018

Por Gisela Marziotta

La Legislatura aprobó el presupuesto 2019, cuya esencia es el ajuste y el aumento de los intereses de la deuda pública. El gobierno porteño proyectó para el año próximo subas en todos los servicios, aunque no se iniciarán obras públicas nuevas ni habrá inversión para nuevas estaciones de subte.

Gran parte del ajuste caerá sobre los salarios públicos y las áreas de vivienda, trabajo, educación, salud y cultura. 

Mientras los porteños pagarán un 38 por ciento más de ABL el año próximo, según el presupuesto de la Ciudad de Buenos Aires aprobado por la Legislatura, a los trabajadores del Estado se les aumentará solamente un 26 por ciento. Además, el gobierno porteño proyectó para 2019 una mayor carga tributaria que golpea directo el bolsillo de los vecinos con aumentos que van desde el 90 por ciento en estacionamientos y acarreos; 58,4 por ciento en electricidad, y hasta el 54 por ciento en multas.

Según lo planificado por el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta, además, en 2019 no se iniciarán obras públicas nuevas y solamente se limitará a terminar las comenzadas este año, para lo que se destinan más de 50 mil millones de pesos.

Tampoco habrá inversión en el subte para nuevas estaciones. El gobierno porteño renovó la eterna promesa incumplida de cada año de finalizar la construcción de 52 escuelas especialmente en la zona sur de la Ciudad de Buenos Aires.

En sintonía con el gobierno nacional, el ajuste y el aumento de los intereses de la deuda pública, que supera los 25 mil millones de pesos, son la esencia del presupuesto con el que gobernará Rodríguez Larreta en 2019.

Tras un debate que duró casi tres horas y que se adelantó debido al G20, el proyecto fue aprobado solamente por el bloque oficialista Vamos Juntos, mientras que tanto el kirchnerismo como el Bloque Peronista y los partidos de izquierda votaron en contra; y Evolución, el GEN y el Partido Socialista se abstuvieron. Fueron 34 votos positivos, 16 negativos y 9 abstenciones.

El pago por intereses de deuda alcanza los 25.815 millones de pesos, lo que representa un récord histórico de 8 puntos de participación en el gasto total. Los intereses de la deuda, que fueron el determinante para el presupuesto que elaboró el Ejecutivo porteño para el año que viene, aumentaron más del 77 por ciento producto del proceso devaluatorio de este año.

Según el análisis realizado por el Centro de Estudio Metropolitanos (CEM), en la última década el peso de la deuda en los gastos totales saltó de un promedio de 1-2 por ciento entre 2008 y 2016 a un 8,1 por ciento para el año próximo.

“En el presupuesto 2017 se destinaron 6584 millones al pago de deuda, el año que viene, en un salto de cerca del 300 por ciento nominal, se pasa a 25.815 millones de pesos”, precisa el informe.

Una de las carteras más beneficiadas es la de Seguridad, ahora a cargo de Diego Santilli, que cuenta con una partida de 4100 millones de pesos, que incluye la construcción de nuevas comisarías por 1463 millones.

El presupuesto cuenta con partidas para la policía “nueva” que solamente apunta a salarios; pago de una deuda “espiralizada”; burocracia de altos cargos, gasto real que crece “casi 70 por ciento”, aunque por otro lado quedan las escuelas rotas, niños y niñas sin vacantes, hospitales en tren de fusión, falta de inversión en subtes y nuevos espacios verdes.

El salario policial pasó de cero puntos en el 2008 a tener un 11 por ciento en el 2019, mientras que el salario docente perdió 9 puntos, ya qué pasó del 19 por ciento al 10 del gasto total. Mientras que los sueldos en el área de salud perdieron cinco puntos de participación.

Desde la oposición coinciden que es un presupuesto de “ajuste en recesión”, y en el que los números “sólo cierran para pagar los intereses de la deuda”. En ese sentido, precisaron que “gran parte del ajuste caerá sobre los salarios de los trabajadores públicos y sobre las partidas destinadas a vivienda, trabajo, educación, salud y cultura”.

“El presupuesto aprobado ayer prevé una inflación del 23 por ciento y estamos cerrando el año con una inflación que casi llega al 50 por ciento, por lo que, en términos reales, el presupuesto tendría una caída de más del 6 por ciento (-6 por ciento de crecimiento), es decir, la ciudad tendrá un menor poder adquisitivo para cumplir con sus funciones, brindar servicios e invertir. Habrá menos recursos para satisfacer las necesidades de educación, salud, promoción y acción social, cultura y trabajo”, detallaron desde el despacho del legislador Santiago Roberto.

Además, durante el año 2019, la Ciudad tendrá que hacerse cargo de más gastos de los que se ocupó hasta ahora, ya que el Gobierno Nacional va a dejar de financiar los subsidios al transporte de colectivos que suman unos 4100 millones de pesos; a la tarifa social de agua de Aysa por 380 millones de pesos; y de la electricidad por 700 millones de pesos; que fueron traspasados a la Ciudad.

Estos subsidios más la eliminación del “fondo sojero” representará para la ciudad un costo de 6050 millones de pesos, a lo que se le suma la caída de 7.000 millones de pesos que se dejan de percibir de Ingresos Brutos (IIBB) por la adhesión al pacto fiscal. “Todo junto es un agujero de 13.000 millones de pesos”, precisaron desde la Legislatura.

Según el análisis del CEM, “los gastos totales previstos para 2019 ascienden a 321.457 millones de pesos. Un 25,8 por ciento más que en 2018, cuando el presupuesto alcanzará los 255.456 millones de pesos”.

“En el comparativo se observa claramente que, en relación al año anterior, es un presupuesto de menos obras y más deuda. Los gastos de capital sufren una variación nominal de apenas un 8,7 por ciento mientras los intereses de la deuda aumenta nominalmente un 77,2 por ciento, se destinarán 25.815 millones de pesos al pago de la deuda”, señala el informe del CEM.

Según el análisis, “en términos nominales, pero mucho más en términos relativos cae la inversión pública, en obras. De 48.057 millones de gastos de capital en 2018 se pasa a 52.256 millones en 2019, un salto nominal de apenas un 8,7 por ciento que se convierte en negativo si se calcula la inflación proyectada”.

Además, señala que en el marco de dos años de recesión, y con el impacto que esto tiene en los recursos propios de la Ciudad, el presupuesto “se propone una mayor carga tributaria”.

“El GCBA proyecta aumentos del 90 por ciento en estacionamiento y acarreo, 58,4 por ciento a compañías de electricidad, 54 por ciento en multas y 38 por ciento en ABL”, subrayan desde el CEM.

Por último, para el 2019 hay áreas que sufren fuertes caídas nominales: industria y comercio (-58,7 por ciento), cultura (-22,9 por ciento), turismo (-18,9 por ciento) y agua potable y alcantarillado (-17,8 por ciento). Se observa una caída sostenida del peso de las funciones educación y salud. De representar casi el 50 por ciento del gasto en 2008 a apenas supera el 30 por ciento el año que viene.

Cierra La Giralda y deja más de diez familias en la calle

29.11.2018

Los herederos de la histórica confitería porteña de la Av. Corrientes 1453, aducen que no les alcanza para pagar los sueldos y busca un comprador del fondo de comercio.

 

La confitería La Giralda cuenta con diez meseros que en su mayoría superan los veinte años de antigüedad en la empresa.

Ya el año pasado, los Nodrid, familia dueña de La Giralda y de muchas otras propiedades dejaron de pagar los sueldos, y ahí poco a poco por necesidad tuvieron que dejar de trabajar para conseguir changas y así llegar a fin de mes. La empresa se presentó al Seclo, pero nunca cumplía las promesas de pago.

Los mozos Antonio Jaimez tiene 16 años de antigüedad, mientras José Orellana 21, ambos reclaman el pago de los haberes adeudados junto a sus compañeros Guillermo Orellana y Antolín Vera de 30 y 19 años trabajando en la Giralda respectivamente.

Si bien en el 2017 las irregularidades pasaron a ser moneda corriente la situación de los trabajadores de La Giralda nunca fue buena como relata la abogada que representa a los mozos "La situación siempre fue irregular, a trabajadores de más de 30 años de antigüedad siempre los mantuvieron con parte del sueldo en negro. En 2017 estuvieron casi dos meses sin pagar los salarios, no les hacían los aportes patronales, dejaron caer todo el fondo de comercio. Siete trabajadores les iniciaron juicios para poder cobrar lo adeudado. Nodrid es una familia muy pudiente y con varias propiedades. Les iniciamos una causa penal para frenar la venta de los bienes" contó Verónica Sánchez

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