Comunicadores del Sur

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“Querían hacer el juicio cuando la Metropolitana ya no existiera”

14.5.2017

El miércoles comenzó el juicio oral contra tres agentes de la Policía Metropolitana que dispararon balas de plomo en pleno centro de la capital en 2013 durante la represión a la Asamblea de la Sala Alberdi y que hirieron a tres personas, dos de ellos periodistas que cubrían el hecho. Están acusados de homicidio en grado de tentativa calificado por su condición de integrantes de una fuerza de seguridad. Actualmente los tres forman parte de la Policía de la Ciudad, aunque no cumplen funciones. Por Javier Borelli

 

Apenas tenía 20 minutos el 14 de marzo de 2013 cuando desde dos formaciones de policías de la Metropolitana dispararon contra los jóvenes que habían mantenido un acampe en el hall de ingreso al Centro Cultural San Martín para evitar el vaciamiento del espacio artístico. Las balas de plomo impactaron contra dos periodistas que fotografiaban la represión sobre la Avenida Corrientes a la altura de la intersección con Paraná. A Germán Darío de los Santos, fotógrafo de DTL! Comunicación Popular, la bala de plomo le entró por la cara externa del muslo y le salió por el otro lado. A Esteban Ruffa, fotógrafo de ANRed, se le incrustó en la tibia, donde aún permanece alojada por el riesgo que significa tratar de sacarla. El único proyectil que se recuperó fue extraído de la pierna de Mario Fumaroni, que participaba del acampe.Se trataba de una posta de plomo de calibre compatible con las escopetas usadas por la Metropolitana.

Las principales pruebas que sirvieron para documentar lo sucedido fueron provistas por la Red Nacional de Medios Alternativos (RNMA) que cubrieron la represión. Cuatro cámaras distintas muestran los fogonazos del momento de los disparos. Dos "cámaras domo" más del Gobierno de la Ciudad ubicadas sobre la Avenida Corrientes ratificaron lo ya señalado por la querella y una pericia de gendarmería permitió identificar a los responsables que, a pesar de ello, negaron todo en su indagatoria.

"En los videos también se advierte que después de que se producen los disparos que gendarmería reconoce, uno de los policías patea algo hacia un fueguito y otro se agacha a recoger algo. Lo mismo que vimos en el puente Pueyrredon cuando juntaban las postas de plomo", analiza María del Carmen Verdú, abogada de los comunicadores populares y referente de la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (Correpi).

Verdú recuerda que las municiones usadas son las mismas empleadas en el Parque Indoamericano por la Metropolitana en diciembre de 2012, donde también había actuado uno de los procesados, Gabriel Heriberto Pereira de la Rosa. Precisamente este oficial estuvo a cargo del reaprovisionamiento de las armas en la represión la madrugada sobre la calle Corrientes. Además, en un allanamiento a su casa realizado en 2014 se encontró un verdadero arsenal: casi cuatro mil cartuchos de bala de distintos calibres (entre ellas las postas de escopetas Mossberg 12/70 usadas en ambas represiones).

Los tres acusados integraban la División de Operaciones Especiales Metropolitanas(DOEM), cuerpo especializado en tareas de alta complejidad, pero provenían de otras fuerzas. Miguel Antonio Ledesma y De La Rosa habían pasado por la Federal; mientras que Nelson Maximiliano Acosta formó parte de la Bonaerense. "El tribunal oral había fijado fecha para noviembre de 2016 pero horas antes lo suspendieron por ’problemas de agenda’ y se postergó hasta ahora. Nuestra interpretación es que querían que el juicio contra la Metropolitana se haga cuando ya no existiera la fuerza", explicá Verdú. "Todo el tiempo nos meten el cuento de la nueva fuerza, pero es la suma o división de las anteriores.Y nunca hay normativa
para tirar libremente, pero es lo que sucede”. Mañana terminarán las exposiciones y llegará el turno de los alegatos.

 

Nueva fuerza, viejos vicios

 

El jefe de la Dirección General de Conducción Operativa de la Federal durante la represión a la Sala Alberdi era Guillermo Calviño. La querella entonces lo imputó junto con el comisario Pedro Carnero por "incumplimiento de los deberes de funcionario público en calidad de coautores" ya que, a pesar de estar en conocimiento de los heridos con balas de plomo (tal como consta en las comunicaciones de la Federal incorporadas a la causa), no adoptaron ninguna medida al respecto. Calviño está involucrado en la investigación que se le sigue a José Potocar, su segundo entonces, por el cobro de coimas. Además está acusado de encubrir a barras de Boca y de liberar la zona de la redacción de Tiempo durante el ataque de la patota en julio de 2016. En febrero último Martín Ocampo, ministro de Justicia y Seguridad porteño, lo designó como superintendente de la Policía de la Ciudad con fecha retroactiva al 1 de enero. Carnero, por su parte, hoy dirige la Dirección General de Comisarías de la Policía de la Ciudad.

“El operativo de represión e impunidad de Macri y sus socios se encuentra en una completa crisis”

13.5.2017

Marcelo Ramal visitó la villa 21-24 y se refirió al 2×1, Arribas y Potocar

El legislador Marcelo Ramal (PO), precandidato a Diputado Nacional por el Frente de Izquierda, recorrió la Villa 21-24 junto Gabriel Solano, precandidato a legislador porteño. También estuvo presente Amanda Martín, dirigente docente de Ademys y precandidata a legisladora. Los acompañaron vecinos y jóvenes que recientemente fundaron el Polo Obrero del barrio y luego abrieron un nuevo local del Partido Obrero.

La recorrida comenzó en el camino de sirga, donde los vecinos que deben ser reubicados reclaman una vivienda digna en el propio barrio. Ramal denunció que "por el contrario los primeros reubicados fueron llevados a barrios alejados y se le otorgaron viviendas en monoblocks mal construidos. Las obras en el camino fueron paralizadas y los predios se han convertido en un basural".

El cierre de la actividad se realizó en el local del Partido Obrero con una charla con los vecinos presentes, muchos de los cuales denunciaron la escalada represiva de la Policía de la Ciudad y la Prefectura. Marcelo Ramal afirmó que “el operativo de represión e impunidad del macrismo se encuentra en una completa crisis. El 2×1 para los genocidas, que fue redactado en los despachos de Macri y Carrió, fue golpeado por la movilización popular. Arribas, el jefe de los espías e íntimo de Macri, protagoniza un escándalo de corrupción en el caso Odebrecht. Y finalmente el jefe de la nueva policía de Macri y Rodríguez Larreta votada por los legisladores de Lousteau y el kirchnerismo se encuentra preso por corrupción y acaba de renunciar. Lo mismo pasa en la provincia de Buenos Aires con la bonaerense de Vidal. Es a este gobierno de corrupción e impunidad al que salen al rescate Carrió y Ocaña con sus candidaturas. Pero también Lousteau que reclama a gritos ser incluido en la interna de Cambiemos".

Ramal finalmente llamó a reforzar la lucha por el juicio político a la Corte del 2×1 y a una gran campaña por la vivienda digna, la educación pública y los derechos de la mujer trabajadora junto al Frente de Izquierda.

Nora Cortiñas en la segunda audiencia de los baleados en la Sala Alberdi

13.5.2017

El viernes 12 de mayo comenzó la segunda audiencia en el juicio que imputa a tres policías de la Metropolitana por herir con armas de fuego a tres personas, dos comunicadores de la RNMA – uno de ellos fotógrafo de esta agencia – y el tercero, un joven de una biblioteca popular. Se hicieron presentes en la audiencia para solidarizarse Nora Cortiñas (Madres de Plaza de Mayo – Línea Fundadora), Pablo Pimentel (APDH La Matanza), y Susana Ancarola (Encuentro Memoria Verdad y Justicia-EMVyJ), entre otros/as. “Queremos toda la justicia y queremos toda la verdad, y además queremos que se cumplan los sueños de nuestros hijos, que era la justicia social: que en este país no hubiera hambre, no hubiera persecución política ni ideológica. Es por eso que estoy acá y en la Plaza, adonde hay que ir”, remarcó Norita.

 

Desde las 10 se llevó adelante la segunda audiencia contra la policía que diseñó el actual Presidente Mauricio Macri (Jefe de Gobierno porteño en 2013). Se retomó la declaración de testigos por parte de la querella, que habían quedado pendientes en la primer audiencia del miércoles pasado, luego de haberse negado a continuar su declaración los tres efectivos imputados. Aquella vez sí lo hicieron los damnificados Germán de los Santos, Esteban Ruffa y Martín Fumaroni, quienes exhibieron videos sincronizados de diferentes cámaras, donde se observó los disparos que partieron de una columna policial.

En esta segunda convocatoria se acercaron para solidarizarse Nora Cortiñas, referenta de Madres de Plaza de Mayo – Línea Fundadora, el referente de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) de La Matanza, Pablo Pimentel, y Susana Ancarola del Encuentro Memoria Verdad y Justicia, entre otros/as.

La gravedad del crimen, al dispararle con armas mortales a manifestantes, y particularmente a comunicadores populares que cumplían sus funciones de cobertura periodística, proyectó la causa a una escala nacional. El miércoles pasado se iniciaba la audiencia cuando todavía estaba en vigencia el escandaloso fallo de la Corte Suprema de Justicia que otorga el beneficio del 2×1 a culpables de crímenes de lesa humanidad, aunque esa misma noche el propio gobierno mandaba un proyecto a la Cámara baja para volver sobre sus pasos y anular la decisión judicial. También esa tarde se movilizaron medio millón de personas para terminar con las dudas.

“Queremos que se cumplan los sueños de nuestros hijos que era la justicia social: que en este país no hubiera hambre, no hubiera persecución política ni ideológica. Es por eso que estoy acá, y en la Plaza, adonde hay que ir”.

Nora Cortiñas se refirió a los recientes hechos sobre el fallo de la Corte y explicó por qué había asistido en solidaridad con los baleados por la policía Metropolitana: “Ellos tienen odio contra el pueblo, nosotros no odiamos, nosotros consideramos que la lucha debe seguir hasta que se logren todos los objetivos, que se abran todos los archivos, que nos digan que paso con cada uno de los detenidos desaparecidos y toda la justicia. No se puede perdonar los crímenes horrendos que se cometieron y acá no hubo guerra sucia, acá hubo ejército de ocupación al pueblo, acá no hubo teoría de los dos demonios, acá hubo un pueblo de lucha y la muestra más grande fueron los 30 mil detenidos-desaparecidos y los más de 10.000 presos políticos, todos torturados, miles de personas se tuvieron que ir al exilio para salvar su vida. Entonces queremos toda la justicia y queremos toda la verdad, y además queremos que se cumplan los sueños de nuestros hijos que era la justicia social: que en este país no hubiera hambre, no hubiera persecución política ni ideológica. Es por eso que estoy acá, y en la Plaza, adonde hay que ir. Todos los jueves desde hace 40 años.”

 

“Acá tiene que haber un fallo ejemplar”

 

Luego, Pablo Pimentel manifestó sus primeras impresiones en esta segunda audiencia del juicio: “Acostumbrado a los juicios que se hace contra la policía de Buenos Aires. Tuvo una actitud corporativa cuando taxativamente dijo que estaban prohibidas las balas de plomo. Por eso va a ser muy importante que se revea esta grabación y este audio porque este señor dijo que se tiraron las dos balas (y desconocía el reglamento que prohibía el uso de armas de fuego en estas manifestaciones). Estuvo muy bien María del Carmen (Verdú) que se lo hizo saber: ahí hubo otra contradicción”.

En cuanto a las expectativas que le genera el juicio, expresó: “Espero que sean contundentes, y que allá de un fallo condenatorio y ejemplar, que también sea un mensaje para el macrismo de que los conflictos sociales, las reivindicaciones del pueblo no se resuelven con represión, menos con balas de plomo y sobre todo estamos hablando de alguien que reprimió en el Parque Indoamericano, y si esto coincide acá tiene que haber un fallo ejemplar”.

Renunció José Potocar, el jefe de la Policía PRO detenido por coimero

12.5.2017

Procesado y detenido en una causa por coimas organizadas desde comisarías porteñas, quien fuera presentado por Rodríguez Larreta como un ejemplo policial finalmente dejó su cargo.

El detenido comisario José Pedro Potocar, acusado de liderar una banda de policías coimeros, renunció hoy a la jefatura de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, después de que la Cámara del Crimen porteña rechazó su pedido de excarcelación.

El Ministerio de Justicia y Seguridad porteño informó oficialmente sobre la dimisión y dijo que “el Gobierno le aceptó la renuncia”. “La conducción de la Policía de la Ciudad continuará bajo la responsabilidad de la Secretaría de Seguridad, a cargo de Marcelo D’Alessandro”, agregaron desde la cartera porteña.

La renuncia se dio luego de que los camaristas Mariano Scotto y Mauro Divito, de la Sala 7 de la Cámara del Crimen, no hicieran lugar al pedido de la defensa de Potocar para que el policía fuera excarcelado y de que el fiscal ante la Cámara, Mauricio Viera, recomendara mantenerlo detenido ya que habría “serio riesgo de elusión” e incluso posibilidades serias de “amedrentamiento y hostigamiento” a testigos.

El oficial está arrestado desde hace casi dos semanas y fue procesado como jefe de una asociación ilícita que cobraba dinero ilegalmente a comercios, vecinos y cuidadores de autos en la calle, principalmente en los barrios de Núñez y Saavedra.

De esta manera, el primer jefe de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, creada el año pasado por el Gobierno de Horacio Rodríguez Larreta luego de la fusión entre la Metropolitana y parte de la Federal, deja su cargo y se retira por la puerta menos honorable: las rejas.

Obviamente el pedido de coimas y la extorsión a la población no es algo que sólo hacían Potocar y sus subordinados ni mucho menos es patrimonio de la flamante Policía de la Ciudad. Es más, lo sorprendente en este caso es que hayan caído presos un puñado de uniformados que durante años contaron con la protección política de sus superiores políticos y sus amigos judiciales, sean éstos del signo partidario que sean.

Comenzó el juicio a 3 policías por la represión a comunicadores de la RNMA

10.5.2017

Los policías reprimieron la toma de la Sala Alberdi con balas de plomo e hirieron a tres personas, dos de ellos comunicadores populares que integran la Red Nacional de Medios Alternativos. En conferencia de prensa la semana pasada habló su abogada, María del Carmen Verdú, junto a ellos y algunos militantes que acompañaron la resistencia en aquel momento. También estuvieron Marcelo Ramal y Laura Marrone del Frente de Izquierda. De esa convocatoria se realizó una cobertura conjunta entre la Red Nacional de Medios Alternativos junto a Radio Sur. La primera audiencia se está desarrollando esta mañana, luego de una postergación del comienzo del juicio, en Talcahuano 550 a las 9 y media de la mañana. La militancia se convocó a las 8 y el debate oral está a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal Nº7. Los acusados son tres efectivos de la entonces Metropolitana, Pereira de la Rosa, Ledesma y Acosta

 

¿Por qué pospusieron?

 

María del Carmen Verdú, abogada Esteban Ruffa y Germán Darío de los Santos, señaló: "Estos policías Metropolitanos ya están disueltos y unificados con la policía de la Ciudad. Aunque siguen siendo la fuerza de este distrito, pertenecen a la misma fuerza política que el gobierno nacional. Nosotros creemos que esta postergación, sin otra explicación que los problemas de agenda del Tribunal, tuvo el tono político de bajarle la trascendencia a esta instancia judicial porque ya es un juicio no a tres integrantes de la policía existente sino de una fuerza que ya no existe". Para la abogada de CORREPI, "esto en términos de que esto es un juicio a la policía de Macri. Como brazo armado del Estado, en ningún caso se trata de individualidades o fuerzas con algún problemita especial de indisciplina o mayor o menor índice de corrupción sino de una política que tiene la tonalidad que le va a imprimir el gobierno de turno de acuerdo a las necesidades", aseguró.

"La Ciudad de Buenos Aires tiene el índice de policía cada cien mil habitantes casi más alto del planeta. Un índice que no tienen las ciudades más militarizadas de Estados Unidos o los países centrales de Europa. No lo tiene México, ni Perú, ni Bolivia ni Colombia", informó Verdú.

 

El recuerdo de un fotógrafo

 

Esteban Ruffa, uno de los comunicadores baleados, se presentó: "Soy fotógrafo de la Agencia de Noticias Redacción (ANRed) en la RNMA. El 13 de marzo en horas de la madrugada fuimos heridos con impactos de balas de plomo en las piernas dos periodistas y un manifestante que también recibió impactos en el estómago y la pierna. En mi caso, tengo un plomo incrustado dentro de la tibia. Esa noche hubo una orden de realizar un despliegue represivo brutal sobre la avenida Corrientes y la zona aledaña. Hubo elementos tecnológicos que nosotros nunca habíamos visto, hubo detrás de la orden una intencionalidad de accionar de forma muy agresiva y de despejar", aseguró Ruffa sobre el objetivo policial. "Fuimos perseguidos varias cuadras casi llegando hasta el Obelisco y estábamos tratando de registrar lo que sucedía. Evidentemente había una orden de que periodistas o quienes estuvieran allí registrando fueran especialmente agredidos. La represión estuvo enmarcada en el accionar que vimos en el Parque Indoamericano, en la intrusión violenta en los terrenos del Borda. La Justicia lamentablemente no nos acompañó. Queda un gusto amargo", aseveró.

Germán Darío De Los Santos, intregrante de Dtl!, otro de los baleados, expresó: "Desde la comunicación popular, sabemos que lo que hacemos implica esta tediosa labor de estar en la calle. Hay un contexto de violencia generalizada de parte del Estado, las policías se unifican y están desarrollando planes mucho más acabados. La Policía Federal también tiene sus imputados en esta causa que no hizo nada para impedir los balazos de plomo. Estas son fuerzas que supuestamente estaban enfrentadas en ese momento, la Federal y la Metropolitana. Sólo para aclarar que esas enemistades se terminan cuando hay que reprimir al pueblo", consideró. De Los Santos cerró toda una definición sobre el rol de los comunicadores populares: "Nos sentimos parte del pueblo, por esa razón corrimos el mismo riesgo que quienes estaban ahí manifestándose. Todas las fuerzas, me parece, empiezan a mirar lo que leemos como una avanzada represiva. Ese gobierno que cayó hace cuatro años con la sucesión de represiones, hoy está ahí arriba. Nadie está preparado para recibir una bala de plomo en esas circunstancias, además el compañero se estaba retirando ¿Cómo defenderse de una fuerza que recibe esta clase de órdenes? Lamentablemente van a venir más luchas que impliquen más represión, así que tratemos de prepararnos", advirtió.

 

El contexto del juicio

 

Lucía, del Frente Juvenil Hagamos Lo Imposible HLI), que forma parte del espacio de coordinación que conformaron RNMA-CORREPI-HLI para empujar esta causa, explicó: "Nosotros formamos parte de este juicio porque esa noche fuimos parte con otras organizaciones y activistas. Hoy vivimos esta escalada represiva que no sólo tiene que ver con la violencia en las calles sino con relativizar si fueron 30.000 desaparecidos que no es algo menor y sirve para legitimar esa represión en las calles. El Estado no garantiza derechos fundamentales para poder desarrollarse en la vida y el gobierno actual focaliza la represión en la juventud. Pudimos ver como entró la policía al Mariano Acosta para intervenir una protesta estudiantil, también en la Universidad de Jujuy, también reprimen a los docentes que luchan por el salario y aumentan el presupuesto en la Ciudad al armamento policial antidisturbios", señaló sobre el contexto político que se suscita en materia represiva. "Esa represión nos afecta a los jóvenes no solamente en el ámbito educativo sino también en el de nuestro trabajo. Argentina es el país con mayor desempleo juvenil en toda América Latina. La única posibilidad efectiva y rápida de conseguir el empleo es entra a las fuerzas represivas. Así es como ellos lo sugieren, nosotros entendemos que no es un trabajo, sino que es formar parte del aparato represivo del Estado para controlar las luchas de los trabajadores y del pueblo en general", aseguró Lucía. Para la militante, "esto se puede ver en los barrios, en el día a día en las calles, cuando nos detienen arbitrariamente por ser jóvenes, por ser mujeres, también somos víctimas de diferentes problemáticas de violencia de género, de trata de personas, y creemos que es la policía la que no nos recibe en las comisarías y la que tiene que activar la búsqueda cuando una piba no vuelve de la escuela a la casa. Nosotros entendemos que es importante que escuchen este planteo de avanzada represiva. Hay que pensar en quiénes fueron los primeros que salieron a denunciar la represión, Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, para luchar contra la impunidad de ayer y de hoy, también CORREPI", destacó. Refiriéndose a las víctimas de la represión en la Sala Alberdi, remarcó: "Los dos compañeros comunicadores populares que fueron baleados con plomo merecen que estemos acá para denunciar este hecho, seguir defendiendo el valor de la vida y para lograr que estos oficiales vayan presos en el juicio con la lucha popular. Esto es un proyecto político que ahora tiene Larreta así que vamos a encontrarnos en las calles y esa es otra de las cuestiones que nos convoca a este juicio".

 

¿Por qué es corrupta la policía?

 

Para Marcelo Ramal del Partido Obrero en el Frente de Izquierda "esta nueva Policía de la Ciudad que se constituyó hace más o menos un año con estos represores, los del Indoamericano, del barrio Papa Francisco, de todos los episodios de violencia institucional que tuvimos en la Ciudad en los últimos años. Ahora a esta Policía la denuncian de coimas y eso da cuenta de otra violencia institucional que es contra los que trabajan en la calle, los vendedores ambulantes, los trapitos que ahora aparecen como parte de esta red de extorsión de naturaleza represiva. Es importante en instancias como esta saber que esta red de corrupción es la retribución o el vuelto chico que recibe el aparato represivo para jugar el papel que vemos acá, el de reprimir las luchas populares, de golpear a los que no tienen acceso a la cultura y a los que en la Ciudad se organizan por vivienda, salud y educación. Es fundamental que entendamos que detrás de eso que aparece como un hecho aislado, quienes están detrás de esto, además de corruptos son represores", definió.

María del Carmen Verdú hizo un aporte: "El jefe de la Tercera, que garantizó el perímetro para que no pudieran acceder más manifestantes a bancar la resistencia a la cana mientras la Metropolitana disparaba, ese comisario estuvo en la foto entre Larreta y Macri cuando se lanzó la policía de la Ciudad. Era un posible primer jefe y no pudo hacerlo por la cantidad de causas que arrastraba de la Policía Federal".

Al apoyo y la solidaridad se sumó Laura Marrone de Izquierda Socialista, actual legisladora por el FIT: "Desde el Frente de Izquierda nosotros presentamos un proyecto para pedir la interpelación del ministro Ocampo por la represión a las mujeres el 8 de marzo y las detenciones del 6. Es evidente que estamos ante una escalada. Felicito por la precisión que han tenido los involucrados en la causa. He participado de la denuncia. Tenemos la memoria que hoy nos levanta una voz inclaudicable por los derechos humanos y contra la reconciliación de la Iglesia. Gracias a CORREPI por todo el apoyo que dan a las causas de quienes viven el gatillo fácil en el sur de nuestra Ciudad particularmente golpeado de nuestras fuerzas represivas", dijo.                  

 

Expectativas

 

Esteban Ruffa, que todavía tiene el casquillo de plomo alojado cerca de su tibia, contó: "Llega el esperado juicio. Pasaron cuatro años, en el medio hubo una postergación, tuvimos que esperar otro año. El Juzgado nos jugó feo en ese sentido. Estamos fortalecidos porque estamos más organizados, más preparados y focalizados en que esto avance. De acá tiene que salir una sentencia bien clara, ejemplificadora que dé por sentado las bases de que la comunicación comunitaria, alternativa y popular cumple una función que no puede ser cercenada ni atacada, que debe ser valorada y que el Estado debe garantizar las condiciones mínimas y las garantías necesarias para que podamos desarrollar nuestra tarea". Para el comunicador, "este ataque no fue inocente, fue bien planificado y estructurado desde los altos mandos de las fuerzas policiales y con una clara decisión política de acompañar nuestra labor y nuestro trabajo cotidiano que acompaña la lucha de distintas organizaciones. En ese momento el poder político y las fuerzas entendieron que había que despejar no sólo la manifestación o a los que desarrollaban actividades para visibilizarse sino también tratar de que los registros sean los mínimos posibles, que no hubiera nadie que pudiera sembrar a través de su lente alguna prueba que incriminara frente al accionar violento de la policía. Estoy nervioso", admitió y explicó por qué "Yo no soy de exponerme, yo expongo. Esto del juicio me pone del otro lado, en evidencia, pero es lo que hay que hacer, es lo que tenemos que impulsar para poder seguir acompañando las luchas para dar lugar a esta construcción que es la comunicación que realizamos desde nuestros medios".

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