Comunicadores del Sur

www.comunicadoresdelsur.com.ar

 

Parque Indoamericano: 12 años de impunidad

7.12.2022

El 7 de diciembre de 2010 un operativo conjunto de la Policía Federal y la entonces Metropolitana desalojó el predio de Villa Soldati ocupado por cientos de familias que buscaban acceder a una vivienda. La respuesta violenta del Estado dejó dos personas muertas y varias heridas. La causa sigue sin avances y demuestra la dificultad estatal para investigar hechos que involucran a fuerzas de seguridad. Por Centro de Estudios Legales y Sociales.

El 3 de diciembre de 2010 centenares de familias con dificultades para acceder a una vivienda ocuparon el Parque Indoamericano, en el barrio porteño de Villa Soldati. Cuatro días después, la jueza Cristina Nazar ordenó el desalojo del predio. Un operativo conjunto de la Policía Federal Argentina y la entonces Policía Metropolitana reprimió con extrema violencia la toma y causó las muertes de Rossemary Chura Puña y Bernardo Salgueiro y graves heridas con balas de plomo a otras cinco personas. Durante los días del conflicto, también fue asesinado Emiliano Canaviri Álvarez. La ocupación del Parque visibilizó diversas problemáticas, entre ellas la vulnerabilidad de las familias que alquilan en las villas de la ciudad, la imposibilidad del acceso a un hábitat digno y la respuesta violenta del Estado ante estos conflictos sociales.
Además de las balas de plomo que mataron e hirieron a quienes estaban en el predio, el accionar ilegal del 7 de diciembre de 2010 incluyó el despliegue de efectivos sin uniforme, el uso abusivo de disuasivos químicos y el disparo de al menos de 580 municiones antitumulto. Cuando el terreno ya estaba vacío, policías de la Metropolitana persiguieron a los tiros a quienes huían a refugiarse donde podían. Otros efectivos dispararon desde arriba de un puente hacia adentro de la villa 20. Ninguna de las personas muertas o heridas estaba dentro del Parque, lo que demuestra que el operativo continuó una vez que el predio ya había sido desalojado.
En marzo de 2018, la jueza Mónica Berdión de Crudo sobreseyó a tres jefes de la Policía Federal y a cinco jefes y 24 agentes de la ex Policía Metropolitana por los homicidios de Rossemary y Bernardo y las lesiones ocasionadas a otras cinco personas durante la represión. Al mismo tiempo, la jueza procesó a Ricardo Picart, efectivo de la ex Metropolitana, por su responsabilidad en los dos homicidios y las lesiones.
En mayo de ese mismo año, la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional revocó los sobreseimientos de los policías y de los jefes policiales y ordenó que se continúen investigando sus responsabilidades. Además, confirmó el procesamiento de Ricardo Picart. Cuatro años y medio después, la causa sigue estancada. Las medidas de prueba que ordenó la Cámara en 2018 se empezaron a producir lentamente después de tres años de inactividad.
Un despliegue policial como el del Indoamericano, con las características, la duración y las gravísimas consecuencias que tuvo, requiere que rindan cuentas ante el poder judicial quienes lo planificaron, dirigieron y tenían el deber de controlarlo, así como todos los que intervinieron. Además, en este caso particular, los ocho jefes estuvieron presentes en el lugar del operativo o bien, dando órdenes desde la sala de operaciones.
Todo este tiempo sin avances en el expediente, muestra la dificultad estatal para investigar seriamente y juzgar hechos que involucran a integrantes de las instituciones de seguridad y es un grave mensaje acerca de que la represión y el accionar abusivo de las fuerzas pueden permanecer impunes. A doce años de la represión, las víctimas esperan una respuesta y que se avance hacia el juicio oral.
En la causa, el CELS representa a los padres de Rossemary, Sabina Puña Chambi y Galo Chura Paco, quienes viven en Oruro, Bolivia. Rossemary tenía 28 años al momento de su muerte y vivía en el barrio de Los Piletones, junto a sus hijos de 7 y 9 años.

Siguen los reclamos en el subte con apertura de molinete y paro en la Línea D

5.12.2022

Este lunes, de 20 a 21 horas el acceso en varias estaciones estará liberado mientras que el servicio permanecerá interrumpido desde las 21 horas hasta el cierre del servicio. Esta acción como las anteriores se informa con anticipación. Las trabajadoras y trabajadores y la AGTSyP demandan la reducción de la jornada laboral y un plan de desasbestización.

Este lunes, las y los trabajadores y la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP) realizarán nuevamente medidas de autodefensa. De 20 a 21 horas los accesos en las estaciones Catedral, 9 de Julio, Pueyrredón, Agüero, Bulnes, Scalabrini Ortiz, Plaza Italia, Palermo, Ministro Carranza, Juramento y Congreso de Tucumán de la Línea D estarán liberados mientras que el servicio permanecerá interrumpido desde las 21 horas hasta el cierre del servicio.
Demandan la reducción de la jornada laboral, la contratación de personal faltante y la compra de trenes para suplantar a los que contienen asbesto. Ante la falta de respuesta de la empresa concesionaria Emova y el Gobierno porteño, ingresan a la cuarta semana de lucha.
Este mineral, el asbesto, que está prohibido desde el 2001, ya afectó a más de 70 trabajadores y causó la muerte, como mínimo de otros 3, además de poner en riesgo a los millones de usuarios sobre los cuales no hay ningún control ni estadística.

Repudio de la Colectiva de Autoras: faltan mujeres en la programación teatral de la Ciudad

4.12.2022

Por Colectiva de Autoras

Transcripción de la carta que la Colectiva de Autoras publicó el 18 de noviembre pasado en repudio a la desigualdad de género en la programación 2023 del Complejo Teatral de Buenos Aires.

Al Ministro de Cultura de la Ciudad de Bs As, Sr. Enrique Avogadro.

A la Directora del CTBA, Sra. Gabriela Ricardes.
C/C
A los medios de prensa. Al sector cultural. A la comunidad:

Por la presente expresamos nuestro repudio a la desigualdad de género en la programación 2023 del Complejo Teatral de Buenos Aires y exigimos su revisión con su consecuente modificación.
Para el 2023 hay 1 dramaturga programada y sólo 2 obras, (de 24), dirigidas por mujeres. Es decir un 4% de dramaturgas y un 8% de directoras. La programación presentada, no solo atrasa, deja invisibilizada la producción de tantas autoras argentinas. Esta actitud recuerda los peores momentos de nuestro país, cuando durante la dictadura militar, el Complejo Teatral de la Ciudad de Buenos Aires decidió no estrenar autores argentinos porque según su parecer no había dramaturgia de nivel para estar en la programación.
Teatro Abierto fue en su momento una respuesta a esa política denigrante a nuestra cultura. Se alzaron voces particulares, que lograron expresar lo que la sociedad toda estaba reclamando, eso y mucho más fue Teatro Abierto. En el 2018 el CTBA tenía un 1% de su programación dedicada a visibilizar a las autoras. Frente al reclamo expresado en los medios ante tan escandaloso hecho en el 2019 los porcentajes subieron mínimamente, en el 2020 atravesamos la pandemia y durante el 2021 y 2022 sabemos que se completó la programación demorada por dicha situación. Esperábamos, junto a toda la comunidad, conocer la programación 2023 y esperábamos que junto al cambio de gestión, se dialogara con el nuevo paradigma de aplicación de derechos en cuestiones de género y paridad laboral.

La desigualdad de género en la programación presentada es un acto de violencia laboral, económica y simbólica para todas las mujeres de la comunidad teatral. No hay peor acto de violencia que ocultar al otrx, silenciar su voz. Hacer ver ante la comunidad de la Ciudad de Buenos Aires que no hay voces de autoras argentinas. La comunidad sabe que esto no es cierto, que la muestra del talento de nuestras autoras se puede ver en el resto de los escenarios porteños. ¿Por qué entonces tal desconocimiento a la producción de las mujeres? Es una declaración política en materia de género, negando e invisibilizando las luchas feministas de los últimos tiempos.

Insistimos, pedimos frente a semejante acto de violencia que revisen la programación y la modifiquen. Exigimos una programación en términos de equidad.

Por todo lo antes expuesto, solicitamos tenga a bien otorgarnos una reunión presencial.
Nos quedamos atentas a una pronta respuesta.
Escribir a: redeslacolectivaautoras@gmail.com
Se puede adherir a la carta en este link
* El artículo contiene lenguaje inclusivo.

Abrazo simbólico contra el cierre del Jardín de infantes en Agronomía de la UBA

1.12.2022

Por Ernestina Arias

Desde la comunidad educativa del Jardín Materno Infantil Agronomitos de la Facultad de Agronomía UBA convocan para el lunes 5 de diciembre a un “abrazo” simbólico a la institución, ubicada en Tinogasta 2406, ciudad de Buenos Aires, a las 10 de la mañana. Bajo la consigna No al cierre de sala de 3 y 4, sí al ingreso irrestricto, padres y madres denuncian que la decisión “fue tomada de una manera que no fue ni participativa ni consensuada y desoyendo los históricos reclamos de la comunidad de Agronomitos.”

Trabajadores y estudiantes de la Facultad de Agronomía de la UBA (FAUBA) se organizaron para evitar el cierre de la sala de 3 y 4 años del jardín materno-infantil Agronomitos. Este lunes 5 de diciembre, a partir de las 10 de la mañana en el Pabellón Central tendrá lugar un “abrazo”, en defensa de Agronomitos, por el acceso irrestricto ampliando el cupo de ingreso por sala que hoy en día es de 12 niños y niñas.
La idea es “visibilizar la importancia que tiene el jardín para toda la comunidad compuesta por estudiantes, docentes y no docentes”, afirman en sus redes sociales e invitan a la actividad a toda la comunidad de la FAUBA, ex agronomitos y a quienes deseen mostrar su apoyo al proyecto educativo.
El jardín Agronomitos tiene 34 años de existencia y pasaron por allí les hijes de muchísimos docentes, no docentes y estudiantes, quienes cumplen o han cumplido funciones en la gestión de la Facultad. “Desde la sala de bebés hasta la sala de 4 años los niños y las niñas son acompañados por un plantel docente capacitado y un programa pedagógico que garantiza el crecimiento y desarrollo intelectual-emotivo de nuestros hijos e hijas, mientras sus madres y padres trabajamos cerca”, sostienen desde la comunidad organizada, y profundizan “en este último tiempo se han visibilizado y generado políticas que buscan la equidad de género, y el fortalecimiento del rol de la mujer. En este contexto, creemos justamente que la existencia de Agronomitos es un apoyo explícito para las mujeres docentes, estudiantes, investigadoras y no-docentes de la FAUBA.”
En el petitorio que impulsan por la inclusividad y el proyecto educativo, relatan que una reunión a mediados de noviembre entre la comisión de Padres de Agronomitos, madres y padres de Agronomitos y autoridades de la Facultad de Agronomía se les comunicó la decisión que fue tomada “de una manera que no fue ni participativa ni consensuada y desoyendo los históricos reclamos de la comunidad de Agronomitos.” El cierre pronosticado de la sala de 4 años será a partir del año 2024 y se cerrará la sala de 3 años a partir del 2025.
Madres y padres de Agronomitos sostienen que la comunidad ha tenido voluntad para sostener económicamente el funcionamiento de la sala de 4 años, pero fue desestimado por las autoridades. Por lo tanto, creen que la decisión del cierre de ambas salas “es política y no presupuestaria.” Proponen en su reclamo la solicitud de cargos pre-universitarios para las docentes de la institución y un plan de obras que amplíe y mejore la estructura edilicia.
Contacto de redes y blog: https://linktr.ee/sosagronomitos
Petitorio:
https://docs.google.com/forms/d/e/1FAIpQLSdxX6gqOww79OgjbytwdQFhLmXzVqUZB9YXRdIGj2McSV2i4Q/viewform?fbclid=PAAaZATLARqaT7tAyr74yVy26hRKEuwCeGdxDqqeF9wPN4ZTNkYMMR7vsfc04

Avanza el juicio contra la policía de CABA que mató a Santiago Santucho

1.12.2022

El joven de José C. Paz tenía 17 años y recibió dos balazos, hace dos años y medio. Estaba desarmado.

Avanza el juicio por el crimen de Santiago Dylan Santucho, el joven de 17 años que fue asesinado a balazos en mayo de 2020 en el partido bonaerense de José C. Paz, en manos de la agente de la Policía de la Ciudad, Romina Luján San Roque. Organizaciones como la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (Correpi) acompañan a la familia de la víctima y esperan una condena efectiva para la uniformada y que el caso marque un precedente para que los integrantes de las fuerzas de seguridad tengan prohibido usar el arma reglamentaria fuera del horario de servicio y de civil.
San Roque optó para que sea juzgada por un Juicio por Jurados, cuyo proceso comenzó este lunes y se extenderá por cinco audiencias hasta el próximo viernes 2 de diciembre. “Estamos en la puerta de los Tribunales de San Martín con Carlos y Mariana, los padres de Santi. En la primera jornada, la policía de la Ciudad que lo fusiló hace dos años y medio, mencionó que la víctima fue ella como policía armada y el victimario un chico de 17 años desarmado quien recibió tiros de costado y casi por la espalda”, expresó en las redes sociales la referente de Correpi, María del Carmen Verdú, acompañada por los padres del adolescente.
“También escuchamos la declaración de Carlos, el papá de Santiago, que nos contó su historia de vida y nos conmovió”, describió la abogada desde las puertas de los Tribunales y añadió: “Empezaron a desfilar otros testigos, sobre todo policías de la Provincia que llegaron al lugar inmediatamente después. De hecho, cuando el patrullero aún se acercaba llegaron a escuchar los últimos dos disparos que hizo San Roque y cuando llegaron, ella ni siquiera estaba en el lugar porque ella se fue a su casa y silenció todo lo que había ocurrido hasta que sus jefes de la Policía de la Ciudad la vinieron a buscar dos horas después para ir a la comisaría para presentarse”.
Por otro lado, Verdú reconoció “las expectativas que nos genera un juicio como este por Jurados donde es mucho más difícil romper con esa lógica que se nos impone desde la prensa hegemónica desde el discurso del punitivismo populista, haciéndonos creer que un pibe chorro menos es un bien para la sociedad. Nosotros decimos “Ni un pibe menos” y “perpetua” para el Gatillo Fácil”.

El caso Santiago Santucho

Según se pudo reconstruir, el 3 de mayo de 2020, a las seis y media de la mañana, en el mencionado partido de José C. Paz, la oficial San Roque, de franco y de civil, disparó al menos cuatro veces contra Santucho. Dos de los balazos impactaron en el cuerpo del chico, de los cuáles uno ingresó en el glúteo izquierdo y le causó la muerte.
En lugar de quedarse en la escena e informar a la Bonaerense sobre lo que había pasado; o incluso llamar a una ambulancia para asistir al joven que aún agonizaba, la mujer salió corriendo. Sí se estableció que la agente comentó lo sucedido a los gendarmes que se encontraban en ese momento en la estación de tren, quienes le dijeron que “estaban haciendo servicios adicionales por lo que no podían dejar ese lugar, y se fue a su casa. Recién desde allí llamó primero a su comisaría de la Policía de la Ciudad y luego al 911”, precisaron en un comunicado desde Correpi.
“Como de costumbre –insistieron desde la Coordinadora-, el parte policial fue tomado al pie de la letra y en el inicio de la causa judicial se sindicó a Dylan como “imputado” por el delito de robo agravado en grado de tentativa, y a la policía San Roque como damnificada. Pero pronto quedó claro que no hubo otras armas en la escena más que la reglamentaria de la oficial San Roque, que disparó por la espalda al pibe que se alejaba de ella, y fue imputada por el homicidio”.

Usted es el visitante N°